Esplendido poemario realmente intenso y emotivo, cuyos poemas destilan un amplio conjunto
de temáticas existenciales como son el paso del tiempo, el silencio, la soledad, la injusticia, el
miedo, el olvido, la verdad o la esperanza que rememora a través de una relación profunda, el
sentido de la vida, sus horizontes, sus paisajes y, también, sus irremediables contradicciones.
Poemas que escrutan los senderos del tiempo y sus servidumbres; los pálpitos incansables de
la vida y sus huellas imborrables que refulgen en los pozos profundos de nuestras almas y en el
caudal indomable de las conciencias.
Tus versos tienen la singularidad añadida de constituirse en espacios donde gravita la
insumisión, el inconformismo y el compromiso revestido de esperanza en la humanidad,
en la naturaleza y en la vida misma.
Excelentes poemas de los que extraigo algunos – a modo de ejemplo- que me han gustado muy
especialmente: «Una tierra donde las auroras», «Enfrentarse al espanto y la vergüenza, «Que el
silencio no sea resignación» que me encanta; «Hay tumbas que en su silencio», «Alzan la voz
cruel», «Clandestinos»…
Recibe mi cordial felicitación por este espléndido y valiente poemario, repleto de sensibilidad,
conciencia y emoción.